La semana 10 de embarazo es una de las semanas más esperadas por los futuros padres pues es la última del bebé como embrión.
¡Felicidades! Pues a partir de esta semana tu bebé ha entrado oficialmente en el periodo fetal. Esto significa que la parte más difícil de su desarrollo, en donde se crean todos los órganos básicos, ya ha finalizado.
Entonces la próxima ya será un feto y puedes estar segura que todos sus órganos ya están formados y en su sitio, aunque todavía pase un tiempo en funcionar con autonomía.
Ahora si es mucho más evidente el cambio en los pechos de la mujer. Si te encuentras en esta semana posiblemente ya tengas que cambiar la talla de tu brasier. Esta semana el médico especialista cambia la forma en la que se refiere al bebé. Cuando termina la semana 10 de embarazo éste deja de usar la palabra embrión para llamarlo feto.
Esto se debe a que ya ha cambiado mucho y su desarrollo deja evidencia de que es un ser humano a simple vista a pesar de su diminuto tamaño.
Cambios en el bebé durante la semana 10 de embarazo
En la décima semana el feto tiene el tamaño de una aceituna (oliva) ya que mide un poco más de 3 centímetros (un poco más de 1 pulgada) y puede que al final de la semana las medidas del bebé ronden los 4 centímetros.
A partir de ahora su tamaño se comienza a duplicar y podrás ver cómo crece a un ritmo elevado.
Es por ello que de ahora en adelante ya el medico podrá empezar a calcular su peso, que en esta semana será aproximadamente de cinco gramos.
A sus órganos todavía les queda un largo camino por recorrer, pues todavía deben desarrollarse bastante para poder funcionar por sí solos, no obstante, debes saber que la placenta ya se encuentra funcionando por completo y será el soporte vital del bebé hasta el final de la gestación.
El cordón umbilical ya se encuentra transportando la sangre entre el bebé y la placenta y, en su base se encuentra un pequeño bulto que contiene los intestinos en desarrollo del embrión.
A partir de esta semana comienzan a desarrollarse también los órganos sexuales del bebé.
En esta semana, la cabeza del bebé ya se separa ligeramente del pecho, por lo que se ve favorecido el crecimiento de cuello y mandíbula.
Su nariz ya sobresale bastante de la cara, la boca y los labios se han desarrollado casi por completo.
El oído externo también está completamente formado aunque no ocupe todavía su posición final, que será un poco más arriba.
Otros cambios importantes en el bebé durante la décima semana de embarazo es que los dedos de manos y pies del bebé ya han crecido y se han separado, las muñecas también se han formado y pueden doblarse.
Por otra parte comienzan a formarse la lengua, el paladar y los primordios de sus dientecitos.
A pesar de que tú bebe esta del tamaño de una aceituna se encuentra muy activo tragando líquido y moviendo sus extremidades.
El resto de sus órganos vitales, como los riñones, intestinos, cerebro e hígado, ya se encuentran en su lugar y comenzando a funcionar, aunque seguirán en desarrollo a lo largo de todo el embarazo.
Se hace más claramente la silueta de la columna vertebral a través de su piel translúcida y los nervios están comenzando a extenderse desde su médula espinal.
Se le ha empezado a abultar la frente debido a que su cerebro, que ahora se encuentra en la parte superior de la cabeza, se está desarrollando rápidamente.
La cabeza sigue siendo bastante grande, en comparación con el resto de su cuerpecito y mide alrededor de la mitad de la longitud total de su cuerpo.
Cambios del cuerpo de la mujer en la semana 10 de embarazo
A pesar de que para el resto de personas tu embarazo no es evidente, a la semana 10 de embarazo tú ya habrás empezado a notar cómo se asoma la tripita.
Es muy posible que ya hayas engordado unos dos kilos y que tu ropa ya empiece a apretarte.
Durante esta semana es que suele detectarse si un embarazo es gemelar o múltiple.
Algunas mujeres dicen percibir que se encuentran embarazadas de más de un bebé, pero los cambios que realmente se asocian con este tipo de embarazos es la hipersensibilidad de los pechos, náuseas y vómitos extremos o cansancio extremo.
También puede ser un indicativo de esto que en esta semana ya se pueda observar cómo se eleva la parte inferior del vientre, lo que normalmente sucede hacia la semana 12 de gestación.
Recuerda que antes de que estuvieras embarazada, tu útero tenía el tamaño más o menos de una pera; ahora en esta semana tiene el tamaño de una toronja (pomelo).
Este rápido incremento de tamaño y peso puede hacer que los ligamentos que lo aguantan se estiren, causando ciertas molestias. No obstante, todavía es un poco pronto para que esto ocurra.
Si llegas a sentir dolor o incomodidad, es mejor que comuniques con el doctor, especialmente si aparecen manchas de sangre en la ropa interior, hemorragia fuerte, fiebre, escalofríos, flujo vaginal que no te parece normal, mareos o molestia al orinar, o bien, si el dolor no se calma después de descansar unos minutos.
Recuerda que debes estar muy precavida pues durante el primer trimestre es donde más ocurren los abortos espontáneos.
Es posible que hayas notado la producción de saliva más de lo normal y es que esto es algo muy común entre las mujeres embarazadas, sobre todo entre aquellas que presentan acidez (agruras) o entre las que padecen un tipo muy exagerado de náuseas que se llama hyperemesis gravidarum.
Aunque realmente no se sepa a qué se debe este exceso de saliva, algunos médicos han intentado explicarlo diciendo que quizá las embarazadas producen más, o tragan menos saliva (algo que puede pasar cuando el estómago anda un poco revuelto) o ambas cosas a la vez.
Si has comprendido lo que sucede en la semana 10 de embarazo por favor comparte el artículo para que muchas más personas comprendan todos los cambios que ocurren en esta semana.
Si adicionalmente deseas proporcionarnos alguna información no dudes en hacerlo, pues sería genial complementar todo este contenido.
Conoce también que sucede en la semana 11 de embarazo.
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