Si te encuentras embarazada de unas cuantas semanas, ya seguramente habrás comenzado a presentar una cantidad de síntomas y dolencias típicas del embarazo.
Entre los síntomas más comunes se encuentran el mareo, náuseas, problemas estomacales que ocasionan estreñimiento, reflujo gastroesofágico o la acidez.
Los expertos no han dado una causa concreta para que esto ocurra, sin embargo, exponen que todos estos malestares se deben a la explosión de hormonas que ocurre al inicio del embarazo que ralentizan la digestión y la actividad de los intestinos.
Como consecuencia el proceso de digestión de los alimentos se ve afectado, mientras más adelantado se encuentra el embarazo, las molestias estomacales se intensifican ya que el aumento del tamaño del útero presiona el estómago y los intestinos, dificultando la digestión.
En esta ocasión el tratamiento de esta molestia, suele ser la Ranitidina suele ser un medicamento habitual, junto con el Omeprazol.
Pero ¡Ten cuidado! No puedes automedicarte.
Lo primero que debes hacer cuando tengas demasiadas molestias es consultar con tu medico, pues solo puedes tomar los medicamentos que él te indica.
Generalmente la Ranitidina se recomienda para casos moderados o más intensos de acidez.
Uno de los medicamentos para tratar la acidez es la Ranitidina, por lo que en esta ocasión trataremos de explicar todo lo relacionado con la Ranitidina en el embarazo.
¿Qué es la Ranitidina?
La Ranitidina es un medicamento que pertenece a los llamados bloqueadores H2, y este se encarga de reducir la cantidad de ácido que produce el estómago.
Es por ello que se emplea para tratar el reflujo gastroesofágico, es un excelente tratamiento cuando el reflujo del ácido producido por el estómago provoca calor estomacal, lesiones en el esófago y úlceras.
También se emplea en otros casos como en los que se presenta el síndrome Zollinger-Ellison, en el que se produce demasiado ácido en el estómago.
¿Puedo tomar Ranitidina en el embarazo?
De acuerdo a muchos estudios que se han encargado de analizar si este medicamento tiene efecto sobre el feto, este medicamento resulta seguro durante el embarazo.
Pues los especialistas aseguran que no hay riesgos para el feto, incluso durante el primer trimestre de embarazo.
Entonces, Sí, puedes consumir Ranitidina durante el embarazo, pero recuerda que no debes decidir por tu cuenta cual medicamento tomar, siempre es recomendable que antes de tomar cualquier medicamento antiácido o para la protección gástrica, lo consultes con un médico.
El consumo de Ranitidina también durante la lactancia, está permitido. Pero se ha comprobado que la Ranitidina se excreta en la leche materna, por lo que se debe usar bajo prescripción médica durante el periodo de lactancia.
Una cosa que debes saber de la Ranitidina es que tampoco la puedes usar de manera prolongada, pues este medicamento enmascara los síntomas de otras dolencias más graves, en el caso de lleves más de dos semanas usándolo sin ningún resultado positivo debes acudir de inmediato al médico.
Otra precaución que se debe tener es que en pacientes que presentan enfermedades hepáticas es recomendable analizar sus efectos, al igual que con pacientes con insuficiencia o fallo renal, ya que podría generarse una acumulación del fármaco.
Posibles efectos secundarios de la Ranitidina en el embarazado
A pesar de que la Ranitidina no está contraindicada en el embarazo, en algunos casos se presentan reacciones adversas al seguir un tratamiento con este medicamento, entre los cuales se encuentran:
- Mareo
- Somnolencia
- Insomnio
- Vértigo
- Dolor de cabeza
- Dolor de estomago
- Malestar estomacal
- Vómitos
- Estreñimiento
- Diarrea
Si cualquiera de estos síntomas se vuelven severos, o no desaparecen, debes avisarle a tu médico de inmediato. Sobre todo en las embarazadas, las reacciones adversas que predominan generalmente son el insomnio, somnolencia, mareo o vértigo.
Interacciones de la Ranitidina con otros medicamentos
De acuerdo a los fabricantes la Ranitidina puede tener las siguientes interacciones:
- Disminuye absorción de: ketoconazol (administrar ranitidina mín. 2 h antes), atazanavir, delavirdina, gefitinib.
- Aumenta absorción de: triazolam, midazolam, glipizida.
- Absorción disminuida por: antiácidos altamente neutralizantes administrados en ayunas, como hidróxidos de Al o Mg, espaciar 1 h; sucralfato a dosis altas (administrar 2 h después de ranitidina).
- Modifica tiempo de protrombina con: anticoagulantes cumarínicos (warfarina), monitorizar.
- A dosis elevadas reduce excreción de: procainamida, N-acetilprocainamida.
- Interfiere con prueba de secreción ácida gástrica y con pruebas cutáneas con extractos de alérgenos, no tomar 24 h antes.
- Falso + de prueba de proteínas en orina con Multistix (realizar con ác. sulfosalicílico).
Otros medicamentos para la acidez en el embarazo
En algunas mujeres la Ranitidina no les resulta como medicamento pues presentan hipersensibilidad al componente principal o alguno de sus ingredientes. Es por ello que necesitan consumir otro medicamento para aliviar su malestar.
De acuerdo a ciertos estudios acerca del uso de medicamentos supresores de la acidez durante el embarazo, se estima que alrededor del 85% de las embarazadas toma algún fármaco para tratar esta dolencia.
Uno de estos estudios se llevó a cabo con la finalidad de evaluar la existencia de posibles malformaciones congénitas en los bebes de las mujeres que, durante el primer trimestre del embarazo, habían consumido Ranitidina, Cimetidina u Omeprazol.
Los resultados del estudio confirmaron que no existe relación entre el consumo de estos medicamentos con malformaciones en los niños, así como tampoco se relaciona el uso del medicamento con partos prematuros o retrasos en el crecimiento de los bebes.
Es por ello que también es posible que los médicos especialistas, recomienden a las embarazadas además de Ranitidina, Cimetidina u Omeprazol para tratar los problemas de acidez durante la gestación.
Sin embargo, debes considerar siempre consultarle al médico los posibles remedios que puedes aplicar, ya que todos los cuerpos y embarazos son diferentes, por lo tanto los efectos que se pueden presentar son diferentes para cada paciente.
Todas las sugerencias que te hacemos no es para asustarte, sino para que de verdad sepas reconocer todos los posibles síntomas adversos y te mantengas en contacto con el médico especialista ya que solo él sabrá a que se deben tus síntomas y tiene la facultad de examinarte para comprender tu estado real.
Por favor no te olvides de compartir el articulo para que mas embarazadas se informen acerca de la Ranitidina en el embarazo.
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